Otra ley más. ¡Una ley de la lectura y del libro! Dentro de poco sacarán una ley regulando la audición de música o el amor, y si no, al tiempo.
Semejante vorágine regulatoria me provoca indignación, hastío y repugnancia, y me invita al anarquismo.
Al anarquismo católico y conservador, eso sí.
25 junio 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Lo suscribo. Igual comentario se podría hacer de la ley del Cine, que impone la famosa cuota de pantalla a los exhibidores, obligándoles a exponer películas españolas, aunque a los españoles no nos dé la gana de ir a verlas.
Y encima, no les quieren pagar un duro por las pérdidas que seguro van a tener. No me extrañan que estén en pie de guerra... Pero es que la gente del cine, ya se sabe, ha prestado importantes servicios a la "causa" que ahora hay que recompensar.
Sin comentarios.
Publicar un comentario