14 julio 2007

Qué sería de nosotros los astronautas

La noticia da vueltas de aquí para allá, pero toda divulgación es poca. Son palabras de Alfredo Sánchez Monteseirín, alcalde de Sevilla. El tema es muy serio, menos mal que alguien por fin ha puesto el dedo en la llaga. Ya era hora de que apareciese un político valiente y denunciase lo que era un secreto a voces; sin demagogias, sin medias tintas, sin dobleces; la verdad desnuda. Hela aquí:

"Es muy bueno que haya astrónomos, estamos en la Avenida de la Astronomía, está bien que haya astrólogos, pero es fundamental que haya astronautas, porque qué sería de nosotros los astronautas, si no nos dijeran los astrólogos o los astrónomos, cómo son las cosas, qué nos qrds...qué nos podemos encontrar allí en el más allá, qué podemos hacer, o qué podríamos desarrollar nosotros los que estamos a...allí, los que nos pisamos el suelo de la realidad de las cosas, qué sería de nosotros si no existieran los astrónomos y los astrólogos, pero qué sería..., qué sería de todos nosotros sin... la... tarea de los astronautas. "

¿Que no creéis posible tanta sinceridad? Pues pinchad aquí.

Los españoles, emocionados, te damos las gracias, alcalde.

13 julio 2007

La ortodoxia

A raíz de la entrada anterior me ha venido a la memoria la dedicatoria de uno de los libros de poemas de Miguel d'Ors:

A mis padres
y a quienes con ellos
me descubrieron
la rebeldía, la audacia y la emoción
de la ortodoxia.

Dicho queda.

Los conservadores, los últimos rebeldes

Excelente entrevista a mi amigo Elio Gallego, patrono de la Fundación Burke que preside Antonio Arcones, y profesor de Filosofía del Derecho en la Universidad San Pablo-CEU.

No dejéis de leerla.

12 julio 2007

Hay que darse prisa

¡Más madera!, digo ¡más leyes!.

Una de las ¡cuatro! de hoy, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte. ¡Cómo les gusta a estos sociatas prohibir! Son totalitarios y enemigos de la libertad. Se prohíbe insultar, exhibir pancartas, y entonar cánticos que contengan mensajes violentos, belicistas, vejatorios o discriminatorios por razón de bla, bla, bla, sexo u orientación sexual. Y de las sanciones, ni os hablo. Todo ello sin olvidar la grimosa prosa pedorra de sus Exposiciones de Motivos ("Existe una radical incompatibilidad entre deporte y violencia, cualquier forma de violencia, incluida la verbal..."). Este tío no ha jugado ni a las chapas.

Como la ley entra en vigor al mes de su publicación en el BOE, todavía podemos. ¡Daos prisa y cantad conmigo!:

De las glorias deportivas que
campean por España
va el Madrid con su bandera,
limpia y blanca que no empaña.
Club castizo y generoso,
todo nervio y corazón
veteranos y noveles, veteranos
y noveles,
miran siempre tus laureles con
respeto y emoción.

Hala Madrid! ¡Hala Madrid!
Noble y bélico aladid, caballero
del honor
¡Hala Madrid! ¡Hala Madrid!
A triunfar en buena lid,
defendiendo tu color
¡Hala Madrid! ¡Hala Madrid!
¡Hala Madrid!

Enemigo en la contienda, cuando
pierde da la mano,
sin envidias ni rencores,
como bueno y fiel hermano.
Los domingos por la tarde,
caminando a Chamartin,
las mocitas madrileñas, las
mocitas madrileñas
van alegres y risueñas
porque hoy
juega el Madrid.


[Si fuera Arp y tuviera tiempo, lo fiskearía detallando cuántos y cuáles preceptos incumple, pero ¡ay!, ni lo uno ni lo otro]

11 julio 2007

Inéditos

El jueves pasado en la UFV (el acto ya lo han glosado otros), el gran d’Ors nos recitó dos bellísimas primicias: Tantísimas tontísimas preguntas y Beliña. El lunes, Enrique –otrora pudoroso con sus versos inéditos– nos regalaba su Blanco y negro donde, como Borges, juega una partida de ajedrez de negras noches y de blancos días, con sesgo alfil de por medio (sólo falta que nos lo recite proximamente).


Y, por si lo anterior fuera poco, llega Julio Martínez Mesanza y honra esta casa con una inédita modificación de su eterna La eterna caballería.
Como sé que algunos no leéis los comentarios, la transcribo ahora, agradecido:


Al orgullo del frío indiferentes

e indiferentes al pensar juicioso

de los que no combaten, sólo saben

cargar de frente, y ésa es su victoria.

En Courtrai morirán. Crécy fangosa

será su tumba. Morirán hermosos

e inútiles, heridos desde lejos,

“Munjoie” gritando, de ebriedad confusos;

sin haber dicho el no, “Munjoie” gritando;

“Munjoie”, “Munjoie”, sin conocer el nunca.


Señala Julio que: “en cada nueva publicación, he pensado sustituir los dos últimos versos e insistir más en los caballeros y menos en el contraste, que juzgo suficientemente explícito”. Y ello porque "Munjoie" ... para mí, es la palabra clave que multiplica ese ciego e inútil entusiasmo, esa ciega y hermosa irreflexión que quise reflejar en el poema.


Gracias, poetas.

10 julio 2007

Give me a break

Creedme, no es pereza, es que llevo unos días de locos. En cuanto tenga un hueco os hablo de "Munjoie".