SALMO FINAL
Grandes son Tus hazañas, Señor, fuerte Tu brazo:
Tú salvaste a Tu pueblo de la lluvia de napalm
de los tanques del Pacto de Varsovia,
de Nixon, de Jomeini, de Fernández Ordóñez.
Señor, Tú nos libraste de los que nos traían
la libertad en sus cañones, Tú
has sacado a Tu pueblo intacto de las fauces
de Kruschev, de la CIA, de Playboy, de Alí Agca.
Tu fuerza no la vencen los misiles
ni L´Être et le Néant
ni Gaddafi ni la Trilateral.
Tu amor no tiene fin, Señor: Tu pueblo,
que atravesó el desierto y el Mar Rojo,
también logró pasar –mayor prodigio–
la segunda mitad del siglo XX.
___________________________________7-X-81
04 agosto 2009
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2 comentarios:
Espléndida conclusión de la serie.
QUE GRANDE ES MIGUEL D'ORS
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